Protesta. Trabajadores de cultura rechazan que ingresos por entradas a Machu Picchu sean centralizados en Lima.
Los días 3 y 4 de noviembre tuvo lugar un paro por parte de los operadores del Sindicato de Trabajadores CAS de la Dirección Desconcentrada de Cultura (DDC) Cusco, contra el Decreto Supremo 043-2022- EF, en el que se indica que todos los recursos que se recauden en instituciones no vinculadas a servicios tributarios deben ser centralizados en el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Esto incluye a Cusco por la recaudación de las entradas a los centros arqueológicos, situación rechazada por los lugareños que consideraban que esos recursos no deberían centralizarse en Lima, sino manejarse a nivel de la Ciudad Imperial, únicamente.
El primer día, la paralización fue total en el ingreso a Machu Picchu, aunque se abrió un corredor hacia el mediodía para permitir el acceso parcial de los turistas. No obstante, cuando se genera una paralización de este tipo, se genera desconfianza y los pasajeros ya no tienen la seguridad para seguir visitando el santuario, refiere John Santos González, presidente de la Cámara de Comercio de Cusco. En esta línea, explica que cada vez que Machu Picchu paraliza, el promedio de pérdida es de S/2 millones.
Pero la paralización no fue solo a nivel del santuario histórico de Machu Picchu, sino que incluyó a todos los centros arqueológicos bajo el control del Ministerio de Cultura, como Sacsayhuamán, Qenqo, Pisac, Pucapucara, Tambomachay, Chinchero, Moray, Ollantaytambo, entre otros. Según los representantes de la Cámara de Comercio, el aforo aproximado de 4.500 visitantes que llegan cada día a visitar el circuito se vio seriamente perjudicado. Si se toman en cuenta las pérdidas también registradas en los otros destinos, la recaudación perdida cada día llega a los S/2,5 millones.
“Creo que la protesta es justa, pero no tiene por qué perjudicar el paso de los viajeros. En este sentido, la Dirección Desconcentrada de Cusco debió prever un plan de contingencia en estos dos días, pues la paralización fue anunciada la semana anterior, pero no se hizo absolutamente nada”, refirió González.
La situación podría agravarse si el lunes el Ejecutivo y trabajadores de DDC no llegan a un acuerdo en reunión convocada por la PCM. Los trabajadores amenazan con una huelga indefinida el 17.
Según Valerio Durán, presidente del sindicato, las protestas son por culpa del Ejecutivo, pues el 15 de junio se solicitó con documento la modificatoria del decreto, sin respuesta.
“Pedimos disculpas a nuestros compañeros que trabajan en el sector turismo, pero no tenemos opciones”, dijo.
El dato
Pedido. La Cámara de Comercio de Cusco espera que la nueva ruta interregional aérea Cusco-Ayacucho-Cusco, cuyo primer vuelo se dio este sábado 4 de noviembre, pueda contrarrestar los efectos de la paralización de santuarios en la Ciudad Imperial.
Fuente: La República
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